Hay muchas razones por las que cambiamos el patrón de consumo de nuestra electricidad, pero eso no significa que sea un cambio de hábito. Cuando ese nuevo patrón es sostenido en el tiempo (es decir, se queda cómo fijo) entonces se ha producido un cambio de hábito (ejemplo: antes no tenías aire acondicionado y ahora sí).

En ese caso, no tienes que preocuparte ni tienes que hacer nada. Nuestra tecnología detectará el cambio de hábito y adaptamos la cuota a tus nuevas necesidades, informándote del nuevo importe y de la fecha de entrada en vigor. Necesitamos 12 meses para detectarlo porque tu consumo y la producción de tus placas varía en verano y en invierno.